UNO.-

En Cutro, un balneario de la costa calabresa, el 26 de febrero el barco lleno de inmigrantes “Summer Love” se partió a pocos metros de la orilla. 94 muertos, 35 de ellos menores. El barco, una embarcación de recreo bajo bandera turca, había salido de la costa turca, en la península de Cesme frente a la isla griega de Chíos el día 22 a las tres de la madrugada con unos doscientos solicitantes de asilo a bordo. El 24 a las 14 horas el motor se paralizó y los patrones de trata de personas les dijeron a los inmigrantes que estaba sobrecalentado.  El día 25 el barco fue detectado por la agencia europea Frontex, de la ya he escrito aquí, cuando se encontraba a 70 kilómetros de las costas de Italia. No se emitió ninguna comunicación de emergencia. Desde ese día 25, el gobierno italiano tenía conocimiento de las circunstancias que hubieran debido hacer sonar la emergencia.

Una recomendación a las autoridades nacionales y europeas del Tribunal Europeo de Derechos Humanos dispone que los barcos con inmigrantes deben ser considerados en apuros tan pronto salgan de su punto de partida. Italia ha violado esa recomendación. Frontex informó en una nota confidencial horas antes del naufragio a una docena de responsables, entre ellos el Ministerio del Interior y a la Guardia Costera italianos. El piloto del Eagle 1, avión encargado de vigilar el barco, alertó a esas autoridades de la violencia del viento ocho horas antes del siniestro. La alerta la emitió el piloto haciendo constar que la embarcación se encontraba en zona SAR (zona de búsqueda y rescate) con mar de fuerza cuatro y olas de 1,25 a 2,50 metros. La Guardia de Finanzas se atribuyó la competencia y no avisó a la Guardia Costera. Hasta las 4 de la madrugada del 26 de febrero no iniciaron los Guarda Costas la operación. Era demasiado tarde. Tanto Frontex como las autoridades italianas no tuvieron en cuenta que la ruta de Turquía a Italia que siguen los tratantes de personas registró 25  rescates de barcos sólo en el año 2022. Entre ellos se produjeron dos naufragios en los que murieron 36 personas. En un informe de Frontex indica que los intentos de cruzar el Mediterráneo desde Turquía a Italia han aumentado un 102% en 2022 en relación con el 2021. Sun Zu : “Solo intervenían si la situación respondía a sus intereses y desistían en el caso de que fuera así”. 

DOS.-

La lucha entre facciones militares en Sudán, que ya era uno de los países más pobres del mundo antes de esta guerra de soldados por el poder, guerra que nada tiene que ver con la población civil que la padece. El ejército regular ha suspendido las negociaciones con los paramilitares y que patrocinan Estados Unidos y Arabia Saudita. La tregua pretendía permitir el reparto y distribución de ayuda humanitaria en el país que está amenaza por la hambruna. El general del ejército regular, Bourhane, ha afirmado que sus soldados están preparados y dispuestos a luchar hasta la victoria. Los combates están teniendo efectos destructivos aterradores en las vidas de mujeres y niños de manera especial. Paz Christi está intentando apoyar a los afectados por el desastre privado por los militares, en medio de una hambruna ya consistente y de un sistema de salud al borde del colapso y desaparición. “Desde la infancia he visto malogradnos mis más caros anhelos”, del poema “Lala Roskh” de Thomas Moore, en recuerdo de los niños sudaneses en esta hora.

TRES.-

El Comité René Cassin, al que pertenezco y en el que coordino el grupo de abogados de atención directa y conflictos olvidados ha seguido intentando conectar con los supervivientes de la masacre de la frontera marroquí-española de Melilla del día de san Juan Bautista de 2022, va a  cumplirse pronto el primer aniversario. En una doble dirección, localizar a los hombres expulsados por Marruecos a las zonas desérticas colindantes con Argelia, Mauritania y Niger lo que resulta un trabajo fatigoso y con escaso éxito y presentando comunicaciones y denuncias ante organismos y tribunales internacionales en representación de algunos de ellos, lo que también resulta tan esforzado y desalentador como la búsqueda. En todo caso y dados los años que llevamos en esa tarea que emprendimos en 1993 con el apoyo del fallecido Juan María Bandres, abogado donostiarra obligado por el gobierno franquista a residir desterrado un tiempo en un perdido pueblo andaluz y que luego con Adolfo Suárez contribuyó decisivamente a la desaparición de Eta polititico-militar, parte de cuyos militantes se integraron en las estructuras políticas legales del País Vasco, no desfallecemos. Hace tres semanas hemos podido tener reuniones en un lugar del desierto argelino, de cuyo nombre no quiero acordarme, con varios jóvenes sudaneses y centroafricanos para recoger sus testimonios, documentos y declaraciones, junto con sus poderes otorgados a nuestra actuación letrada, a fin de iniciar nuevos procedimientos. Y, con este motivo, traigo hoy aquí una llamada de atención sobre lo que ocurre en la República Centroafricana, pues varios de nuestros comunicantes y ahora representados legalmente, son nacionales de aquel país. Como ha escrito recientemente la hermana Elvira Tutolo en un medio italiano “aquí hay una competencia para ver quien mata más, si las Fuerzas Armadas regulares del Estado, las bandas armadas de rebeldes del expresidente Bozize o los mercenarios de la empresa Wagner….que se pelean por la cabeza y la vida del pueblo centroafricano”. El proceso de paz se inició en 2019 con la firma de un documento marco, en Bangui, por las partes en combate. Por un lado los grupos armados con numerosos miembros que lucharon en las guerras internas anti-Balaka y anti-Selena y ahora carecen de dirección ya que que el expresidente Bozizé fue exiliado el pasado 3 de marzo de este mismo año a Guinea Bissau que lo ha acogido por razones humanitarias y para contribuir al éxito del proceso de paz y por otro las fuerzas regulares del gobierno del actual presidente Faustin-Archange Touadéra que ha contratado a la compañía Wagner de mercenarios rusos. La Coalición Patriótica por el Cambio que dirigía Bozizé, presidente desde 2003 a 2013, ha quedado sin dirección al haberse exiliado tras un acuerdo firmando en Luanda (Angola) el 17 de febrero entre Chad, Angola y la propia República Centroafricana. En resumen: hay un gobierno centroafricano más fuerte gracias al apoyo de Ruanda y Rusia y por otro los grupos rebeldes de la coalición patriótica, armados, que se mueven sin rumbo determinado, carentes de liderazgo y con enormes reticencias para coordinarse y participar de modo efectivo en las negociaciones de paz. Una situación explosiva. Las actuales gestiones para llevar adelante de nuevo el estancado proceso de paz están en manos de miembros de la Comunidad de San Egidio. Hay un enorme cansancio entre la población civil y rechazo a los grupos armados que asuelan el país en el que las armas circulan con facilidad y las minas anti-personas explotan a diario, mutilando o matando inocentes. Numerosos jóvenes huyen hacia Europa atravesando Libia, ¡Un horror!, el desierto argelino, otro parecido, hasta llegar a Marruecos. Con algunos de ellos ya estamos trabajando.

CODA.-

Hace tres semanas, en medio de esa situación, un misionero italiano, en Baoro, comenzaba, de buena mañana, una jornada de formación sobre estructura, cuidado y reparación de bombas de extracción de agua dirigida a los alumnos de la escuela de mecánica que mantiene la misión. Esto les permitirá reparar las bombas manuales que existen por miles en los pueblos y aldeas de Centroáfrica. Marcial: “Créeme, no es más sabio decir ¡viviré! Mañana es ya demasiado tarde: ¡vive hoy!”.