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Respuesta sencilla a una encuesta farragosa

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Para el sínodo sobre la familia que se iniciará en Octubre de 2014 y tendrá la sesión para tomar decisones en Octubre de 2015, se lanzó un  cuestionario previo y se recomendó a los obispos que consultaran lo más ampliamente posible a los cristianos sobre ello. ¿Qué se ha hecho? ¿A quien se han entragado y cómo se han tabulado las respùestas, si es que era posible hacerlo con ese tipo de encuesta farragosa? Hace tiempo que ATRIO se ha ofrecido para publicar respuestas parciales. Y hoy ofrece esta de una comunidad cristiana de Santander, que se distingue por su brevedad e ir al grano.

LA COMUNIDAD ECLESIAL DE BASE “IGNACIO ELLACURÍA” RESPONDE AL CUESTIONARIO DEL PAPA

La comunidad eclesial de base “Ignacio Ellacuría” de Santander ha estudiado y orado el cuestionario del papa para el sínodo de la familia y queremos compartir nuestras reflexiones tras unas observaciones previas:

1)      Nos alegra que se abra una consulta sobre este tema ya que la doctrina de la Iglesia sobre la familia dista mucho del sentir de los fieles (sensus fidelium). Muchas familias viven con profundidad su fe y con frecuencia dejan a un lado, a veces con dolor, las enseñanzas oficiales de la Iglesia.

2)      Nos parece que la formulación concreta del cuestionario es farragosa y no ayuda mucho a que pueda haber una reflexión abierta sobre este tema tan importante. Muchos cristianos, no familiarizados con la “jerga” eclesiástica, tienen dificultades para entender este lenguaje.

3)      Nos duele que los obispos hayan dado en sus diócesis muy poca difusión a este cuestionario, aunque dicen que están muy preocupados por la pastoral familiar. ¿No será que están, más bien, ocupados en que no se cuestione su pastoral familiar?

Tras estas observaciones, pasamos a ofreceros las reflexiones que hemos hecho de una manera global, no pregunta por pregunta, al cuestionario.

  • La catequesis que se hace sobre la familia es doctrinaria e ideológica y se da mucha importancia al mantenimiento de unas estructuras familiares tradicionales sin superar una visión patriarcal y sin tener en cuenta realidades nuevas: familias mono-parentales, sin vínculos jurídicos, de homosexuales o lesbianas… Estructuras tradicionales que no son necesariamente las únicas o más evangélicas; estructuras más preocupadas, a veces, de atar que de cultivar la frescura de un amor, venido de Dios, que nos hace libres y responsables. Nos da la impresión de que por un lado va la doctrina que se repite machaconamente, sin demasiada convicción, y por otro lado la vida concreta que va haciendo historia.
  • Nos parece muy importante la necesidad de una reflexión profunda y no partidista para desmontar un concepto interesado de ley natural que utiliza una y otra vez la Iglesia de una manera ilegítima. ¿Quién interpreta lo que es conforme a ley natural y lo que es antinatural? ¿Qué es la recta razón y quién la valida como recta? Con la etiqueta de lo natural se han cometido muchos disparates en las sociedades civiles y en las iglesias de todas las religiones.

Los encargados de velar por la recta doctrina de la Iglesia parecen tener muy claro a quién pertenece la interpretación de qué es y qué no es conforme a ley natural y cuándo algo es verdad inapelable porque proviene de la recta razón. No puede pretenderse que haya una instancia que se auto-arrogue la autoridad humano-divina para tener la última palabra sobre lo que es o no es conforme a la ley natural o a la recta razón. Esto es lo que hace con frecuencia el magisterio católico cuando habla sobre estos temas.

Esto, que parece estar en el terreno de la pura teoría, tiene grandes repercusiones en la práctica. Lo podemos ver con claridad en los siguientes ejemplos:

–          ¿Es ir contra la ley natural y la recta razón el uso de métodos anticonceptivos, llamados por la Iglesia no naturales?

–          ¿Es ir contra la ley natural el que se reconozca el matrimonio de dos personas del mismo sexo que se aman y quieren vivir en pareja de manera estable y con todos los derechos sociales?

–          ¿Es contra la ley natural y la recta razón que dos personas del mismo sexo adopten una niña o un niño?

Creemos que en estos temas no se puede pensar ni obrar a la ligera; pero afirmamos que la búsqueda de lo que es bueno es una tarea que tienen encomendada todas las instituciones y personas que buscan el bien general y no es una exclusiva del magisterio de la iglesia que quiere ir más allá de lo que son sus legítimas competencias. En estos momentos el magisterio está dispuesto a aceptar algunos principios consagrados en el concilio Vaticano II como el pluralismo político y una cierta laicidad del Estado; pero no un pluralismo ético. El magisterio de la iglesia intenta apropiarse la prerrogativa de ser el intérprete de la ley natural. Esto es ilegítimo y acarrea males a la propia iglesia que se enfrenta, sin ningún derecho humano ni cristiano, a la sana autonomía humana.

  • Se pregunta en el cuestionario cómo viven los bautizados sus irregularidades. Nosotros nos hemos fijado en dos ejemplos que se citan: 1) la convivencia “ad experimentum” (experimental), es decir: ir a vivir en pareja antes de casarse y 2) el acercamiento de los divorciados y vueltos a casar a los sacramentos de la Eucaristía y la Reconciliación.

Estos dos ejemplos nos muestran lo alejada que está la Iglesia oficial de la realidad, una realidad no manchada de pecado sino abridora de nuevos caminos. Caminos, en muchos casos, hacia el amor del Dios de Jesús, el Salvador. Quien ha tenido la suerte de hacer estos pasos, que en el cuestionario se llaman poco acertadamente irregulares, en comunidades cristianas fraternales lo vive sin estridencias; quien no ha tenido esa suerte carga con una cruz no salvadora o se aleja de la iglesia por no considerarla madre.

Ojalá el Sínodo sobre la familia ayude a la Iglesia, a la que pertenecemos, a desprenderse de ideologías paralizantes y poderes controladores y así poder reflejar mejor el rostro de Jesús de Nazaret, el Cristo Salvador.

COMUNIDAD ECLESIAL DE BASE “IGNACIO ELLACURÍA”. SANTANDER.

5 comentarios

  • Secundino Pérez

    Creo que el papa Francisco está cargado de buenas intenciones pero sin descargarse de toda una vida al servicio de una iglesia que, como estamos hartos de decir, se mueve en otras esferas, las esferas de la doctrina, la exigencia, la condena, la prohibición, la norma obligatoria etc… mientras que la sociedad civil marcha por veredas que tienen poco que ver con esta. La encuesta es tendeciosa, la he leído, la he releído y nunca he logrado desprenderme del tufo que expele a “orientadora” de las respuestas, orientación incluída en las propias preguntas, como si te estuvieran diciendo “así debes contestar”. El papa Francisco hasta ahora no ha hecho casi nada, algún gesto aquí, algún otro gesto allá, pero está cargándose las esperanzas que generó al principio y, la verdad, hay muy poco d elo que realmente debiera ser un cambio en profundidad, y a este paso, cuando empiece a estar más viejo y menos vital, las fuerzas de la resistencia volverán con mayor fortaleza aún. No es este el papa que necesita esta superestructura instalada en la autocomplacencia y en guerra permanente con todo lo que represente hacerse el harakiri.
    Salud
     

  • Antonio Vicedo

     
    Antonio Elorza, elpais.com: La renovación del papa Francisco . Nos ofrece un parrafo muy en línea con estas reflexiones de la Comunidad de B. I.E. De Santander:-
     
    -”Ahora el eje del dilema entre el Bien y el Mal se dirime en el interior de la conciencia de cada uno, pudiendo contar además con la ayuda de la gracia divina en el marco de una concepción antropológica optimista. La reivindicación de la autonomía de la razón y de la libertad individual se encuentra además reforzada por la confianza en una salvación cuyo promotor es Cristo, por efecto de la cual el perdón (*) reemplaza al castigo. El “pecado” aparece una sola vez en la exhortación y es para ser asimilado a la tristeza y al aislamiento, superables mediante el recurso al Evangelio.”(*Jesús, desde la cruz, suplica al Padre perdón no por la culpa responsable por consciencia y libertad, sino por carencia de las mismas, si ello significa aquel: “porque no saben lo que hacen.)
     
    Todo el montaje moralista eclesial, basado como se ha querido hacer y se ha hecho, en la oposición teórico práctica libre y responsable a la, con tanta generalidad, facilidad y superficialidad, considerada Ley Natural, con esta expresión testamentaria de Jesús agonizante, deja al descubierto su incoherencia evangélica y su carencia de fundamento sólido racional y de fe.
     
    Desde esta perspectiva tan característica de Jesús el ser humano viene obligado a reconocer su propia contingencia , o carencia de capacidad absoluta tanto racional como de libertad y en consecuencia de RESPONSABILIDAD, quedando esta última como marco ineludible de cualificación penal y justificación para una justa disculpa.
     
     
    Esto nos lleva, en el trato del tema en cuestión sobre la Pastoral Familiar, a una exigencia de empezar inexcusablemente por la consideración de lo que viene a ser como la célula o base (materia prima) de la primera y fundamental estructura relacional de dos seres humanos (parejas ma-pa dres e hij*s), todos sujetos, igualmente racionales, libres y responsables en su condición relativa o contingente, e inmensamente dignos por pertenencia a la Humanidad; además para los creyentes en general, por ser criaturas del Dios Creador y, para los cristianos en particular, porque, por fe, aceptamos la común,universal e igual FILIACIÓN DIVINA.
     
     
    Todo esto conlleva, como exigencia, aquí sí, de la propia naturaleza, que LA PERSONA, en cualesquiera condiciones relacionales, siempre y permanentemente, ES SUJETO INALIENABLE, por lo que no puede ser objeto de dominio, ni en cuanto pareja, ni en cuanto hij*, ni en cuanto miembro de cualquier forma o clase de estructura relacional, incluidas las religiosas.
     
    Todo lo relacional, en consecuencia de la exigencia natural, por la que se manifiesta el proyecto divino sobre la Humanidad, queda condicionado por el horizonte del AMOR, (La revelación nos dice que DIOS es AMOR) y las concreciones de colaboración y mutuo servicio.
     
     
    El lazo pues, natural con el que Dios nos ata, mediante la Naturaleza, es el del amor colaborador y, si alguna forma de relación, por la circunstancia concreta que fuera, no permite una auténtica relación de amor, debe esta, por exigencia de libertad y responsabilidad, ser sustituida por otra.
     
    Para que se cumpla aquel principio o aforismo:-Nadie está obligado a lo imposible.
     
     
    De estos presupuestos teórico prácticos han de ir emanando procedimientos progresivos de, uso y no abuso en libertad, de cualesquiera capacidades personales y bienes naturales en todas las relaciones interpersonales, de modo que la HUMANIDAD entera, pueda ser HUMANA y, con ello, se logre el deseado Reino de Dios y SU Justicia, de lo que todas las añadiduras dependen.
     
     
    ¿No está esto en plena coherencia con lo que de boquilla solemos profesar en nuestro cristiano CREDO: –”Por nosotros, los humanos y por nuestra salvación (La terrena, por supuesto, porque sino ¿para qué añadir..) bajó del cielo y se encarnó?

  • ana rodrigo

    Esta encuesta es una tomadura de pelo y un insulto a la inteligencia mínima de un ser humano.
     
    Me explico: si en el mundo hay unos 1200 millones de católicos, en el caso de que la contestasen un mínimo de cien mil, y cada respuesta se convierte en un tratado de moral matrimonial particular de quien responda, ¿cómo se tabulan los resultados de semejante dislate? ¿O es que, realmente, nada les importa lo que realmente piensen los católicos sobre la situación real de la familia y esto es un paripé o un alarde de hipocresía? ¿Es que el cerebro que diseñó esta encuesta no se ha enterado de que existe la ciencia de la estadística?. ¡Por favor, que dejen de tratarnos como tont@s!

  • Gonzalo Haya

    Me adhiero a esta respuesta y me gustaría firmarla.

  • justiniano Liebl

    Ojalá el Sínodo sobre la familia ayude a la Iglesia, a la que pertenecemos, a desprenderse de ideologías paralizantes y poderes controladores y así poder reflejar mejor el rostro de Jesús de Nazaret, el Cristo Salvador.”
     
    Me parece que con este párrafo del documento, el CEB toca al meollo: ”ideologías paralizantes y poderes controladores” – ¿Cómo se puede definir ”una religión” sin estos dos notas esenciales? ¿Será que Jesús quería establecer ”una religión” o solamente comunidades = ”iglesias” dedicadas a la misión de transformar al mundo y con su servicio de la caridad testimoniar el Reino de Dios?
     
    Justiniano de Managua

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