Juan Luis Herrero del Pozo ha sido mucho para ATRIO y de manera especial para mí.

Por una parte un precursor, en su nueva manera de entender el cristianismo con total libertad, con rigor intelectual y compromiso con los más empobrecidos. Cuando le conocí él había recorrido ya un largo camino de liberación, denunciando sin contemplaciones toda religión mágica y opresora como su tocayo y patrono el Bautista.

Por otra parte fue desde los primeros momentos una columna importantísima en este ATRIO, que entre todos estamos construyendo.

De 2005 hemos encontrado ya dos sabrosos comentarios suyos –con el sistema primitivo que utilizábamos para construir diálogo en el portal–  sobre dos temas que podrá rastrear quien esté interesado en ello: contra los obispos respecto al matrimonio homosexual y sobre el plan estratégico que dirigió el nombramiento de Benedicto XVI.

De los muchos artículos que iba a escribir Juan Luis a partir de 2006 en ATRIO, destaco el primero que he encontrado. Se publicaba justamente el 3 de julio de 2006,  tres días antes de que el papa llegara a Valencia rodeado de traficantes de la Gürtel y el mismo día del accidente del metro que aún colea y a cuyas víctimas ha ayudado recientemente, más que nadie, Jordi Ébole. Juan Luis lo titulaba Valencia, muestra de la “túnica rasgada”. Después contó  sus desventuras intentando conseguir de la Iglesia institución que le borrase de sus archivos oficiales, pues él abdicaba de ella, aunque no de la comunidad de creyentes en Jesús.

En 2006 presenté y comentamos su libro Religión sin magia. Pero la presencia definitiva y el gran impacto, de Juan Luis en ATRIO se produjo en 2008, al montar el primero de nuestros talleres de reflexión, para el que abrimos una página especial, donde se conservan completos los muchísimos comentarios: Taller sobre secularidad y fe. Animo a todos a volver a repasar este taller que duró más de la mitad del año 2008.  Se pueden recorrer todas las entradas, de abajo arriba como siempre. Ahí los antiguos podréis encontrar vuestros comentarios. Y los nuevos atrieros conoceréis cómo se fue creando este estilo de diálogo repensando, no rtirando por el desagüe, el cristianismo con rigor intelectual y libertad.

En 2009 fue Juan Luis quien se encargó de presentar semana tras semana los distintos capítulos del libro de Lénaers Otro cristianismo es posible. A partir de ese año es cuando su vista se fue apagando, con una enfermedad irreversible que le ha dejado casi totalmente ciego. Aunque Reyes le lee de vez en cuando algo, al no poder escribir (ha hecho esfuerzos, pero no se ha adaptado a las nuevas técnicas de usar el ordenador sólo con voz) su comunicación con Atrio y otros medios se ha visto muy reducida.

Pero no ha disminuido su recuerdo y cariño a las personas de ATRIO. La cabeza le funciona de maravilla. Ayer mismo hablé un buen rato con él, felicitándole ya las vísperas. Dice que, por otra parte, tampoco tiene cosas nuevas que escribir y decir pues sigue reafirmando y rumiando lo que escribió antes, profundizando con paz y mucho amor en ese Misterio encarnado, sin magia, en todo el universo y sobre todo en la vida humana. Él mantiene una espiritualidad y una mística dialogal, aun sabiendo que cualquier expresión que utilicemos para referirnos al Amado o al Misterio como un Tú es metáfora, pero metáfora muy jugosa para el corazón.

Gracias a su amada Reyes y a sus cinco nietos aún muy pequeños, su vida trascurre en paz y rodeado de mucho cariño. Yo le aseguré todo el nuestro, el toda la comunidad virtual de ATRIO. Él me dijo que correspondía y que os trasmitiera el suyo.

¡Muchas felicidades, Juanito!